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lunes, 19 de diciembre de 2011

La huida estadounidense de Irak


Por. Basem Tajeldine
Investigador del Centro de Saberes Africanos
@BasemTajeldine

Sin el desastre que caracterizó a la huida de EE.UU. de aquel otro desastre bélico mucho más retumbante que sufrieron las tropas de Estados Unidos en Vietnam, hoy hace ya 36 años de aquellos heroicos e inolvidables episodios vividos por el pueblo vietnamita, nuevamente el arrogante imperio huye este vez de Irak sin gloria y ni penas.

Todos las fuentes mediáticas transnacionales apenas hicieron resonancia de lo ocurrido el día 15 pasado. La Euronews sólo publica en un titular las declaraciones del secretario de defensa estadounidense, Leon Panetta cuando dijo “Irak tiene en EE.UU un amigo comprometido”. Pretendían pintar de “victoria” lo que a todas luces era una nueva derrota política y militar de EE.UU en ese país. Pero nada se dijo sobre los intentos de Estados Unidos de permanecer en ese país presionando, meses atrás, al actual gobierno iraquí para que a sus tropas (imperialistas) les sea renovada la “inmunidad” y otros privilegios; tampoco esos mismos medios transnacionales repitieron nada sobre la negativa del nuevo parlamento iraquí elegido el mes de julio del año pasado para que esto ocurriera. Otro punto olvidado por esos mismos medios ha sido la presencia de las Contratistas de Mercenarios (CM) en Irak, ahora ¿Qué será del futuro de las CM? ¿Qué será del futuro de Al-Qaeda (organización terrorista mercenaria al servicio de EE.UU. responsable de incentivar la guerra fratricida entre los sectores religiosos sunitas y chiita) sin el respaldo de Ee.UU.? ¿Podrán los mercenarios sustituir a las bien equipadas tropas de Estados Unidos en el complicado terreno iraquí y enfrentar con éxito a la resistencia de ese país? -en lo personal lo dudo.

Los medios transnacionales mucho menos se han referido a los crímenes de guerra ejecutados por las tropas oficiales y mercenarias de Estados Unidos en Irak. Cerca de 2 millones de iraquíes han muertos en ese país desde los inicios de la agresión estadounidense a Irak: desde la “Guerra del Desierto” (año 1991), también como producto del bloqueo comercial (medicinas y alimentos de los años subsiguientes) y la posterior invasión estadounidense a ese país (año 2003) (cifra estimada por la agencia de sondeo británica ORI, 2007). Otra noticia de la que no se quiere, siquiera, mencionar en esos medios transnacionales ha sido la contaminación por polvo radioactivo (uranio empobrecido) de miles de mujeres iraquíes de la región de Faluya y de otras zonas del país; cientos de niños han nacido con múltiples problemas, deformidades congénitas y muertos producto de ese peligroso agente radioactivo arrojado en los misiles “inteligentes” de Estados Unidos. ¿Cómo esos mismos medios pueden explicarnos el genocidio del pueblo iraquí so pretexto de la “democracia” y la lucha “contra el terror” y la “responsabilidad de proteger” a civiles inocentes?

Pocos habrán percibido que fue precisamente Irán la gran vencedora de esa contienda. Eso lo sabe el Norte, pero no lo dice. La resistencia iraquí de Al Mahdi perteneciente al clérigo chií Múqtada Al Sader, al igual que todos los chiita población mayoritaria en Irak, ven a Irán como el benefactor de su liberación. Estados Unidos sale de Irak derrotado, pero apunta a Irán.


viernes, 9 de diciembre de 2011

Mercenarios-sicarios activados en Venezuela

Por. Basem Tajeldine
Miembro del Centro de Saberes Africanos
@BasemTajeldine

Quienes han seguido mis últimos escritos habrán advertido que los he dedicado al desarrollo de una temática muy delicada, concerniente a una política siniestra que ha venido siendo promovida y ejecutada por las mentes más frías y maquiavélicas de los centros estratégicos imperiales del Pentágono y la CIA, los así llamados “think tank” de la guerra, y por sus oficinas repartidas en todo el mundo (embajadas de EE.UU.). Los Escuadrones de la Muerte, Paramilitares o Autodefensas, etc., no son otra cosa más que grupos mercenarios; sicarios contratados por los estrategas de dichos centros para la ejecución de tareas-objetivos bien trabajados en los laboratorios de la llamada “Guerra de 4ta Generación”. Fomentan “acciones de guerra” y desestabilización magnificados por los medios de difusión de información con el objetivo de generar un efecto psicológico en la opinión pública esperado, de acuerdo a los planes y las necesidades del momento. Pues, sabemos, no nos estamos refiriendo a una táctica de guerra novedosa inventada por un genio criminal tipo Al Capone, sino a la perfeccionamiento de dichas tácticas. La historia de la humanidad está llena de estas experiencia. Desde siempre las burguesías apéndices pro-imperiales de la región han utilizado a grupos mercenarios-sicarios para reprimir al proletariado organizado y a su vanguardia sindical que reclaman mejoras laborales, o para asesinar a los militantes de izquierda. Está vez el empleo de grupos mercenarios se inscribe dentro de una estrategia imperial contra el país mucho más amplia y acabada. En Venezuela se avecina un proceso electoral presidencial pautado para el próximo mes de octubre de 2012. Sin lugar a duda esta situación representa una nueva oportunidad para destruir, esta vez a través de las urnas, a la Revolución Bolivariana. Los Estados Unidos y el sionismo internacional no la dejarán pasar por alto esta ocasión.

No es difícil suponer lo que pretende Estados Unidos y sus lacayos con el empleo de mercenarios en Venezuela. Las experiencias recientes registradas en nuestro país, en Colombia, el Medio Oriente y en el Norte del África nos recuerda que entre sus objetivos se encuentra la eliminación de la vanguardia revolucionaria, la generación de condiciones de inestabilidad dentro del país a través de conatos de “guerra civil” o el asesinato de personas inocentes y “lideres” de la oposición para así responsabilizar a los gobiernos nacionalistas-progresistas y/o revolucionarios de “violadores de los derechos humanos”, “ingobernabilidad” o “instigadores de la violencia” de forma que permita justificar una intervensión imperial amparada en la “responsabilidad de Proteger” a civiles “inocentes”.

Lo que hoy toma mucha fuerza en otras latitudes y muy cerca de nuestras fronteras (Colombia); aqueja en mayor grado a los pueblos árabes del Norte del África y del Medio Oriente, es y será también una táctica intervencionista que será utilizada contra nuestra revolución en los venideros meses previos a las elecciones presidenciales.

El empleo de grupos mercenarios por parte del imperialismo estadounidense y el sionismo internacional, y de sus grandes medios de difusión para magnificar las acciones criminales de estos grupos contra el pueblo y la Revolución Bolivariana, buscará crear las condiciones necesarias que permitan justificar una agresión directa y “legalizada” por los instrumentos imperiales internacionales (como: ONU, OEA, CIDH, CPI, etc.) contra nuestro país con el objetivo de influir negativamente en la reelección presidencial de Hugo Chávez Frías. El formato intervencionista imperial aplicado con cierto “éxito” en el pasado contra Nicaragua, y hoy contra la Jamahiriya Libia y Siria está siendo ensayado para repetirse en Venezuela.

 Paramilitares (mercenarios) colombianos 
capturados en Venezuela en la Finca Daktari

Las agresiones mercenarias contra la Revolución Bolivariana no representan una experiencia nada nueva para nosotros. Ya en el pasado muy reciente hemos sido victimas de la acción criminal de estos grupos. Bastaría con recordar el Golpe de Estado del 2002 y la masacre perpetrada por francotiradores mercenario contra un grupo de revolucionarios y opositores que se encontraban en las inmediaciones de Puente Llaguno (Caracas); los asesinatos en Plaza Altamira por el mercenario Joao Gouveia y los militares opositores (Caracas); los Paramilitares atrapados en la Finca Daktari (muy cerca de Caracas); y los más de 300 lideres campesinos asesinados en el interior de Venezuela, todos estos casos representan pruebas fehacientes de nuestra advertencia. En Nicaragua los grupos mercenarios agrupados en los llamados “CONTRA” lograron influir con éxito en las elecciones presidenciales celebradas en ese país en el año 1984 donde fue derrotado el movimiento sandinista resultando vencedora la la candidata pro-estadounidense Violeta Chamorros.

La canalla mal llamada “oposición” acentúa sus criticas contra el Gobierno Bolivariano culpándolo por la “inseguridad” reinante en el país. Si bien existen verdades que no podemos ni debemos ocultar, extrañamente, muchas de las personas que son victimas del “hampa” terminan siendo asesinadas bajo formas crueles. Inmediatamente la carroñera “oposición” responsabiliza al gobierno de esos crímenes dejándonos ver así sus macabras intenciones. La recurrencia de crímenes horrendos, de secuestros no es algo normal en nuestra sociedad. Si bien existe un segmento importante de la población venezolana que ha sido desde mucho tiempo corrompida por los vicios del capitalismo, el lucro y dinero fácil, la recurrencia y la gravedad de los crímenes que son magnificados por los medios de difusión debe despertar nuestra atención.

El crimen organizado representa la expresión más pura de los principios que rigen el Capital: es la explotación al margen de las leyes burguesas del hombre por el hombre. Pero la repetición de estos hechos vandálicos y terroristas debería llamarnos a todos a la reflexión. Por otro lado, muchos de los voceros de la derecha “venezolana” hablan ya desde sus medios impresos y televisoras de desconocer la segura victoria del Presidente Chávez. Los más descarados criminales también hablan de recurrir a “otras vías” para conseguir su objetivo de derrocar al Presidente Chávez.

La parásita burguesía “venezolana” lacaya nos muestra sus colmillos antes de tiempo. El gobierno y el pueblo de Venezuela, todos, debemos de prepararnos para lo que se nos viene. El imperialismo hoy sumergido en la crisis estructural de su sistema económico capitalista se vuelve aun más cínico y violento por reconquistar su hegemonía perdida en la región. La decadencia imperial es una realidad incuestionable. Sólo la razón de la fuerza bélica y el uso descarado de los organismos internacionales representan las únicas opciones que posee la casta del poder imperial para la reproducción del quebrado sistema económico capitalista y su dominio mundial.

La destrucción de la Revolución Bolivariana (Venezuela) se ha convertido en un objetivo fundamental del imperialismo estadounidense y del sionismo internacional para el próximo año 2012. Saben que sólo destruyendo a Venezuela asestarían un duro golpe no sólo contra los intereses del pueblo venezolano sino también contra toda la rebeldía que camina en región y el mundo inspirada en el ejemplo de la Revolución Bolivariana.

Debemos prepararnos para momentos difíciles. A buena hora nace la Comunidad Latinoamericana y Caribeña (CELAC) nuevo organismo regional que reúne a todos los países de Nuestra América sin la presencia insolente del imperio del Norte; instrumento regional por excelencia que, además de impulsar la integración y unión de nuestros pueblos, primará por resolver de forma pacífica los conflictos internos y/o entre países miembros conforme al Artículo 52 de la Carta de Naciones Unidas. Pero mientras se organiza y estructura la CELAC y cree legislaciones e instrumentos regionales para la defensa, paralelamente, el Estado venezolano debe preparar a sus servicios de inteligencia para prevenir y defender al pueblo venezolano y a la Revolución Bolivariana de la acción criminal y terrorista mercenaria dirigida por EE.UU.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Esperanza en Rusia

Por. Basem Tajeldine
Investigador del Centro de Saberes Africanos
@BasemTajeldine

Aun después del llamado “derrumbe” del Campo Socialista, y la posterior implosión de la Unión Soviética entre los años 1989-1991, Rusia nunca dejó de ser objetivo económico de los capitales transnacionales y principal objetivo bélico del Complejo Militar Industrial de EE.UU. Las inmensas riquezas que subyacen bajo tierras rusas en Siberia; dentro de las aguas del Mar Caspio y en las áreas cercanas a esta la convierte en uno de los mayores reservorios de Petróleo y Gas así como de riquezas minerales del mundo. Rusia tiene dentro de sí todas las posibilidades autárquicas para su resurgir y mantenimiento como potencia también por el reconocido desarrollo industrial, tecnológico y militar. Y es precisamente esto lo que hemos observando en los últimos años; y es fundamentalmente a esto lo que teme el imperialismo estadounidense.

A pesar de todos los esfuerzos invertidos por la CIA-MOSSAD-MI6; contra todas las proyecciones de que la mafia rusa acabaría con todo vestigios de dignidad dentro de ese país; contra todos los ataques, Rusia ha resurgido como potencia y retomado posiciones en el tablero mundial, pero esta vez bajo el sistema capitalista en un contexto marcado por su decadencia. La crisis del Capital influye con mayor fuerza en Rusia donde hoy afloran grandes contradicciones y esperanzas. 

La intromisión de EE.UU. en los asuntos internos de Rusia, por medio de su secretaria de Estado Hillary Clinton quién acusó de "fraude" las resientes elecciones parlamentarias en Rusia donde resultó triunfante el partido nacionalista Rusia Unida (con Vladimir Pútin a la cabeza) y como segunda fuerza política el Partido Comunista de la Federación Rusa PCFR, es muestra del temor y del histórico empeño del imperialismo por acabar con el Oso y la "amenaza" roja. Estados Unidos pretende llevar a Rusia el formato intervención aplicado en el Norte del África y el Medio Oriente que denominaron "primavera árabe". Pero el invierno ruso es mucho más poderoso. 
 
Lo cierto es que el PCFR se impuso como la 2da fuerza política de ese país. Hoy asistimos al renacimiento de la esperanza comunista en Rusia, Europa y en otros pueblos amenazados por la voraz rapiña imperial.


viernes, 2 de diciembre de 2011

La CELAC y los peligros que enfrentan los pueblos



Por. Basem Tajeldine
Investigador del Centro de Saberes Africanos
@BasemTajeldine

La humanidad entera, y nuestra región en particular, enfrenta un peligro de naturaleza mayor. Los demonios se han desatado y escapados del infierno. Ya hoy muchos cuentan sobre el resurgimiento de la “guerra fría” –que nunca lo fue así-; de las posibilidades de una guerra de carácter nuclear contra la República Islámica de Irán; así como de las posibilidades que interfieran Rusia y China en la región del Medio Oriente para evitar perder su zona de influencia pues, pareciera, comienzan a entender que la guerra contra Siria, Libia, Irán Irak, etc., es también la guerra contra ellos mismo. El Consejo de Cooperación de Shangai se activa y algunos de sus miembros convocan al resto a prepararse para lo peor.  

A buena hora nace un nuevo organismo regional que reúne a todos los países de Nuestra América sin la presencia insolente imperio del Norte. La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) es hoy precisamente la concreción una las más importantes propuestas que dejó legada el Libertador Simón Bolívar en el Congreso Anfictiónico de Panamá en 1826 para las generaciones posteriores. Pues, como se dice: “ha llegado el momento de la patria grande soñada por Bolívar y muchos otros libertadores y próceres independentistas que conocieron la historia de nuestras tierras”.


A buena hora Nace la CELAC en un contexto mundial muy delicado, marcado por la crisis estructural del capitalismo y la decadencia imperial manifiesta en sus guerras de rapiña que codician el robo descarado de las riquezas naturales provistas para el desarrollo de los pueblos del Sur. La CELAC se funda en un mundo donde el decadente imperio comienza a perder la hegemonía que sólo hasta ahora ha podido mantener por la razón de la fuerza y la influencia de su sistema económico capitalista. Pero  el fracaso de este último lleva al imperio a imponerse sólo por la razón de la fuerza bélica como única vía de salvación y reproducción del sistema capitalista mismo.

No somos ingenuos. Las naciones deben prepararse para lo peor. La barbarie capitalista que hoy experimentan los pueblos del África y del Medio Oriente toca a nuestras puertas. No es amarillismo esta posición. Sabemos que el imperio intensifica sus políticas intervencionistas contra todos los países que hoy levantan banderas soberanas. Sabemos que el imperialismo estadounidense ansía de Venezuela su petróleo pero también pretende destruir su propuesta Socialista que comienza a influir con fuerza a otros pueblos en el mundo. También sabemos que el imperio no tiene escrúpulos, que buscará destruir cualquier intento de integración regional que se perfile como independiente y con grandes posibilidades de éxito.

Ante la caducidad del infame Ministerio de las Colonias bien conocido como la OEA y la inoperancia de la ONU por su carácter antidemocrático manifiesto en el Consejo de Seguridad de ese organismo (5 países con poder de veto). La CELAC se erige como el organismo regional por excelencia que, además de impulsar la integración y unión de nuestros pueblos soñada por nuestros libertadores, primará por resolver de forma pacífica los conflictos internos y entre países miembros conforme al Artículo 52 de la Carta de la ONU. Pero esto no es suficiente, pues, el ALBA, la UNASUR, y hoy la CELAC están obligadas en avanzar y profundizar en políticas de defensa que vayan mucho más allá de lo puramente económico y del dialogo diplomático. Esto último aun quedará pendiente.